Martes, 22 de abril de 2008. Año: XVIII. Numero: 6700.
ESPAÑA
http://www.elmundo.es/diario/espana/2375483.html <http://www.elmundo.es/diario/espana/2375483.html>
Zouhier lleva al TS las denuncias de Gascón sobre la UCO
El confidente de la Guardia Civil huido envía a la Audiencia un escrito asegurando que el marroquí no ocultó datos del tráfico de explosivos del 11-M
MANUEL MARRACO
MADRID.- El confidente marroquí Rafá Zouhier ha presentado ante el Tribunal Supremo las afirmaciones del también colaborador de la Guardia Civil Mario Gascón que refuerzan la tesis de que el condenado por el 11-M sí mantuvo informada a la Guardia Civil sobre el tráfico de explosivos.
Así consta en el escrito con el que el letrado Antonio Alberca responde a los recursos de varias acusaciones que piden al Supremo que eleve la condena impuesta a Zouhier. La Audiencia Nacional condenó al marroquí a 10 años de cárcel por colaboración con la célula terrorista, frente a los casi 40.000 que solicitaba la Fiscalía.
El escrito rebate los argumentos de las acusaciones -precisando la distinción entre colaborador, cómplice y cooperador necesario- e incorpora el contendido del escrito que Gascón remitió el pasado 14 de marzo a la Sala Penal de la Audiencia Nacional y a la Fiscalía. En él explica las circunstancias por las que no había atendido a la citación como testigo en el juicio del 11-M, y desmentía las acusaciones lanzadas por la Guardia Civil contra Zouhier durante la vista oral.
«He tenido conocimiento de que se me intentó citar como testigo en la vista, si bien no fue posible puesto que, debido a las amenazas del capitán Francisco Sacristán París, de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil [UCO], el cual me apuntó incluso con un arma de fuego para que no hablase, así como por la brutal paliza que sufrí a las puertas de mi casa pocos días después, sin que dicha unidad se dignase a prestarme atención, me abocaron a tomar la decisión de buscar refugio fuera de nuestro país».
En el segundo punto del escrito, ya centrado en Zouhier, afirma que, «si bien uno de los motivos por los que se condenó a Rafá Zouhier es porque se afirma que no avisó a sus controladores de la UCO [...] respecto a que le había estallado un detonador en la mano, lo cierto es que ellos han mentido, puesto que tenían pleno conocimiento, en tanto que fui yo mismo quien se lo comuniqué, lo que ocasionó que decidiesen ir a visitarle al hospital y comprobar dichos extremos».
La condena a Zouhier se basó en que puso en contacto a los terroristas con la trama asturiana de los explosivos y en que, un año antes de la masacre, dejó de informar a la Guardia Civil del tráfico de dinamita. Gascón, sin embargo, asegura que el Instituto Armado «estaba al tanto de todos los pasos de Zouhier respecto al tráfico de Goma 2 ECO», y añade que «era imposible que realizara cualquier operación de tráfico de explosivos con Jamal Ahmidan a espaldas de la UCO».
Respecto a que el condenado de origen marroquí no hubiera comunicado datos sobre el líder de la célula terrorista, Gascón recuerda un pasaje con El Chino: «Jamal Ahmidan me comentó que Zouhier estaba haciendo demasiadas preguntas por la calle acerca de él, y que, como siguiese en esa misma actitud, acabaría matándolo».
Gascón concluye el escrito que incorpora ahora la defensa de Zouhier diciendo que se pone a disposición del tribunal para declarar sobre todos estos extremos, y solicita que se le dé la condición de testigo protegido.
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